Hola mis bellas preciosas!
Cómo han estado? Les cuento que yo de lo más bien, ya contando los días para que nos volvamos a ver, queda tan poquito que no lo puedo creer!
Ya salí de El Salvador, que, por cierto, se llama así en honor a Jesús, el salvador del mundo, incluso hay una gran estatua de él en una importante plaza de la capital. Ahora estoy en otro país de centroamérica, que se llama Nicaragua.
Muy lindo, cierto?
Para llegar acá me demoré tres días, primero desde San Salvador hasta la frontera con Honduras, luego desde ahí hasta un pueblito que se llama Somotillo, en la frontera hondureña con Nicaragua, y el tercer día me adentré al país hasta la isla de Ometepe, donde estoy ahora.
Pocos kilómetros, pero largo camino.
En la frontera Honduras - Nicaragua.
El atardecer del tercer día.
Ometepe significa "dos cerros", en lengua nahuatl, que es el idioma que hablaban los indígenas de etas tierras, y lleva es nombre porque cuenta con dos volcanes, el volcán Madera y el volcán Concepción.
Me gustan los lagos y los volcanes.
Yo de este país no sabía mucho, a veces me da un poco de vergüenza llegar a los lugares sin tener idea de nada, y para Nicaragua me pasé, ni un mapa miré antes de llegar!. Lo único que sabía es que hubo una guerra hace poco (entre 1979 y 1990), que existía esta hermosa isla y que Silvio Rodriguez, el cantante cubano, escribió esta canción:
Con mi mamá escuchabamos mucho a Silvio.
La isla queda en el lago de Nicaragua, que los españoles llamaban "mar de agua dulce", por su gran tamaño, y estoy viviendo con una familia de acá, la dueña de casa es la señora Esperanza, y su hijo de llama Marlon y le gusta ir a pescar.
Marlon con la señora Esperanza.
Pescaditos que cocinamos en sopa y también fritos.
Gatito!
Así va el viaje mis preciosas, lo sigo pasando bien y conociendo lindos lugares. Pero para serles bien sincera ya quiero llegar a casa.
Pronto más aventuras!